El ruido de los aviones

La Coordinadora Verde insta a que se proteja la salud de la población
contra el ruido de los aviones.

Considera obsoletas las directivas europeas que regulan el ruido producido
por los vuelos aéreos en los aeropuertos, de 2002, y pide que se tengan en
cuenta las últimas investigaciones sobre los efectos producidos por el ruido
del tráfico aéreo sobre la salud de la población afectada.
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“El nuevo texto de la Ley de Navegación Aérea que el Congreso empieza a
debatir no protege adecuadamente la salud de la población contra el ruido y
gases emitidos por los aviones”, ha declarado Rosa Burgos, representante de
Zaragoza en la Asociación Nacional de Afectados por el Impacto el Tráfico
Aéreo y miembro de la Coordinadora Verde, que lamenta que una mayoría de
diputados españoles “haya optado por la prevalencia de los intereses
económicos sobre la defensa de un derecho tan fundamental como es el de la
salud”.

Para Rosa Burgos, la indemnización por la pérdida patrimonial de los
afectados y la insonorización de sus viviendas no son medidas que puedan
compensar las consecuencias que se derivan del estrés continuado, del
aumento de la contaminación del aire y del peligro de accidentes al que se
somete a las personas que residen en las inmediaciones de los aeropuertos.
“Ignoramos si el Ministerio de Fomento considera que las personas afectadas
deben vivir recluídas en sus viviendas insonorizadas”, manifiesta la
representante aragonesa, quien reclama la intervención del Ministerio de
Sanidad “porque debe tener algo que decir en lo que afecta a su obligación
de proteger la salud de la población española. No se puede privar a la
población de un derecho constitucional, la salud, para beneficiar a una
actividad comercial, como es el transporte aéreo, ni el deber de soportar el
ruido que se contempla en la reforma de la Ley puede convertirse en el deber
de contribuir con la propia salud a los intereses del transporte aéreo”

Precisamente la huella sonora que se contempla en el texto a tramitar, que
tiene un umbral de 60 decibelios de día y 50 de noche, es la que se
contempla en el estudio encargado por la Agencia Medioambiental alemana,
según un reportaje de Times, y que ha llevado a declarar al profesor emérito
de la epidemiología en la Universidad de Bremen Eberhard Greiser que “vivir
cerca de un aeropuerto puede dañar gravemente la salud humana”. El estudio
se basa en el análisis de los datos de las aseguradoras de salud pública y
fueron extraídos de historiales de más de un millón de alemanes de 40 años y
más que viven cerca del aeropuerto de Colonia-Bonn . Según el estudio, los
varones expuestos al ruido de los aviones tienen un 60 por 100 más de riesgo
de ser hospitalizado por enfermedades cardiovasculares que aquellos que no
viven cerca de aeropuertos; ese porcentaje sube hasta un 93 por 100 más de
riesgo para las mujeres que residen en las cercanías de un
aeropuerto. Además, las mujeres expuestas al ruido de los reactores durante
el día (sobre 60 decibelios) tienen un 172 por ciento más de probabilidades
de sufrir un derrame cerebral que aquellas no expuestas al ruido. Datos
similares se obtienen en relación a las depresiones o cáncer de mama.

Para la coportavoz de la plataforma ecologista, Sonia Ortiga, “tal como se
pide en el manifiesto de alcaldes y asociaciones de afectados, que apoyamos,
resulta perverso que un ayuntamiento con un centenar de habitantes pueda
decidir que en su término se ubique un almacén de residuos nucleares y, en
cambio, una comunidad autónoma no pueda decidir el nivel máximo de ruido en
su territorio”. Ortiga pide la devolución del proyecto al Gobierno, la
confección de un mapa de ruido y el dictamen de una comisión de expertos en
salud pública que debería ser tenido en cuenta en la actualización de la Ley
de Navegación Aérea. “La necesidad que tienen determinadas aerolíneas de
incrementar el número de vuelos en Barajas para llevar a cabo su posible
fusión no puede pesar más que el interés general de la ciudadanía a la hora
de aprobar las leyes, ni deben tampoco marcar el ritmo y tiempos de las
reformas legislativas”, ha finalizado Ortiga.