Los Verdes piden a la OMS la eliminación del mercurio en empastes dentales.

Ante el encuentro de la Organización Mundial de la Salud sobre el futuro
uso de materiales para la restauración dental que tiene lugar los días 16 y
17 de noviembre de 2009 en Ginebra (Suiza), y a propuesta del presidente de
la asociación MERCURIADOS, Servando Pérez Domínguez, la Coordinadora Verde
ha suscrito la Carta dirigida a este organismo mundial por distintas
organizaciones internacionales en la que se le pide una posición activa para
*la eliminación del mercurio de empastes dentales* (amalgamas dentales) y su
sustitución por otras alternativas, como el composite dental de resina y
cerámica, no perjudiciales para la salud.

A nivel europeo, *Noruega y Suecia* ya han prohibido el uso de amalgamas
dentales y otros países tienen restricciones o recomendaciones de no uso
para ciertos grupos poblacionales como embarazadas, niños y personas con
problemas renales, hepáticos o inmunológicos. Por su parte, en
*Cataluña*, existe
una recomendación oficial de no usar amalgamas dentales en embarazadas y
menores de 14 años; mientras que en la Comunidad de *Madrid *la
recomendación es aplicable a embarazadas y mujeres que dan el pecho. Más
aún, el *Consejo General de los Colegios Oficiales de Químicos de
España *solicitó
al Ministerio de Sanidad, en mayo pasado, la sustitución de las amalgamas
dentales por otros materiales alternativos y el *Defensor del
Pueblo*tramita actualmente la queja de
*MERCURIADOS *al Ministerio de Sanidad por el uso no informado de mercurio
en amalgamas dentales y por los múltiples efectos perniciosos de éstas sobre
la salud. Asimismo, en febrero de este mismo año, se planteó una Demanda
Judicial al Ministerio de Sanidad español por varias asociaciones de
pacientes y pacientes a título individual, afectados por mercurio dental y/o
vacunal.

La coportavoz de la Coordinadora Verde, Sonia Ortiga, ante la falta
de iniciativas
oficiales, pregunta al Ministerio de Sanidad que “por qué se sigue poniendo
mercurio en la boca (amalgamas dentales) si la OMS y otros organismos
científicos — incluidos los Consejos y Colegios Dentales de todo el mundo—
reconocen que, cada día, se evapora mercurio de las obturaciones de amalgama
y también se sabe que no existe un umbral de seguridad para el mercurio”.

Por su parte, Florent Marcellesi, coportavoz de la organización ecologista,
se pregunta "a dónde van los restos de las amalgamas dentales, cuando se
ponen y retiran, cuando se fabrican, y cuando las personas que las portan se
mueren". La Coordinadora Verde, ante el dato de que sólo en el Reino Unido
el vertido de mercurio en el alcantarillado, la atmósfera o la tierra
procedente de la amalgama dental asciende a 7,41 toneladas al año, ha
decidido implicarse de lleno en el seguimiento del uso del mercurio, el
metal más contaminante después de los materiales radiactivos.

El Documento de Política General de la OMS de 2005 "El Mercurio en el Sector
de la Salud" establece que “*el mercurio es muy tóxico, en particular cuando
se metaboliza para formar mercurio de metilo. Puede ser mortal por
inhalación y perjudicial por absorción cutánea. Alrededor del 80% del vapor
de mercurio inhalado pasa a la sangre a través de los pulmones. Puede tener
efectos perjudiciales en los sistemas nervioso, digestivo, respiratorio e
inmunitario y en los riñones, además de provocar daños pulmonares”**. **En
1991, la Organización Mundial de la Salud confirmó que el mercurio presente
en la amalgama dental es** **“la fuente no industrial más importante de
emisión de vapor de mercurio**, exponiendo a la población afectada a niveles
de mercurio que superan con creces los establecidos para los alimentos y
para el aire”.*
**
Ante estos riesgos para la salud de las personas y de los ecosistemas, el
Programa de las *Naciones Unidas* para el Medio Ambiente (PNUMA) ya ha
lanzado una iniciativa para evitar la contaminación del medio ambiente del
mercurio, que tiene implicaciones para el uso de la amalgama dental, y que
afecta a todos los gobiernos del mundo. Por su parte, la *Oficina
Europea**para el Medio Ambiente
* lanzó en 2004 la *Campaña Mercurio** Cero*, que tiene como último objetivo
conseguir cero emisiones así como cero oferta y cero demanda de mercurio de
todas las fuentes que el ser humano pueda controlar, a fin de reducir al
mínimo el mercurio en el medio ambiente, a nivel europeo y mundial.