Verdes de Navarra - Nafarroako Berdeak y la Coordinadora Verde se suman a la denuncia por la gravedad de los acontecimientos que se están produciendo en los territorios ocupados del Sáhara Occidental por parte de Marruecos y transmiten su solidaridad al pueblo saharaui.
En palabras de Florent Marcellesi, coportavoz de la Coordinadora Verde y miembro de Berdeak "pedimos al Gobierno Español y a la Comunidad Internacional, que proteja a la población civil saharaui, que está sufriendo las duras actuaciones policiales que la ley marroquí aplica en el territorio del Sáhara Occidental".
Unidades militares y policiales marroquíes han entrado hoy en el campamento de protesta saharaui de Gdaim Izik, cerca de El Aaiún, con el objetivo de desmantelárlo por la fuerza, generando varios muertos, multitud de heridos de diversa consideración, pánico y angustia entre los miles de hombres, mujeres y niños que pacíficamente se concentraban en el campamento reclamando sus derechos más elementales.
Según Marcellesi, "el Estado de Marruecos, con su actitud violenta y antidemocrática, vulnera normas tan básicas como la Declaración Universal de los Derechos Humanos". Esta proclama en su artículo 19 que "todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión".
Por su parte, Sonia Ortiga, coportavoz de la Coordinadora Verde, explica que "instamos a la Unión Europea y en especial al Gobierno Español, y a su nueva Ministra de Exteriores a que hagan un llamamiento al Rey de Marruecos para que ponga fin a esta locura de represión y violencia injustificada, desproporcionada y cruel." El Gobierno español tiene una responsabilidad histórica con el pueblo saharaui y tiene que abandonar su grave pasividad ante las vulneraciones de derechos humanos de Marruecos.
Verdes de Navarra - Nafarroako Berdeak, junto a la Coordinadora Verde, pide una resolución definitiva y justa, a las dos partes implicadas y reconocidas. Hoy mismo empieza la ronda de conversaciones directas en Nueva York entre ambas.